viernes, 27 de agosto de 2010

Los hechos dicen más que las palabras, pero a veces las palabras son más que un hecho.

Te quiero mi amor, te quiero mi vida, te quiero mi aire, te quiero mi lucero ...

Tengo tantas y tantas palabras para llamar a esa persona, que creo que diría te quiero mi corazón. Sí, esa persona a la que se llega a amar, a la que se le entregan tus ganas o desganas de vivir, a la que le entregas tu respiración y tu manera de vivir, y a la que amas con y todas las de la ley. Esa persona que cambia tu tristeza por una alegría, esa persona que cambia tu llanto por un destello de luz en tu mirada, esa persona que te regala uno, dos o todos los abrazos del Universo, tantos que llegaría a rodear la Tierra con sus brazos para alcanzarte.

Sí, esa misma persona que se preocupa por y para tu bienestar, la que te da ese amor que tanto necesitas y te regala esas ganas de vivir que se fueron esfumando con el paso del tiempo y de los años. Esa persona a la que le debes momento inéditos, tantos momentos que has llorado al estar con esa persona, pero no de tristeza, sino de felicidad, de alegría, de orgullo ... Te sientes tan orgullosa de tener a esa persona a tu lado que por momentos piensas, se te pasan imágenes por la mente e incluso sueñas con que te lo puedan arrancar de tus brazos, de tu mirada y hasta de tu mente.

A este tipo de personas son a las que hay que darle las gracias por sacarnos una sonrisa cuando lo necesitamos y que nos abrazan y convencen de que un llanto no tiene sentido hasta que esa persona no se lo merezca y que nunca se lo merecerá porque una persona que te quiere nunca te hará llorar, o al menos eso dicen. Pero eso la mayoría de las veces no sucede, mientras más quieres a una persona más lloras por tenerla y más sufres por retenerla.

Me emociono, sí, porque nunca había sentido nada parecido, porque siempre han sido desprecios, siempre han sido momentos malos y momentos que para mí quedan en el pasado. Y por ello, quiero darle mi más grato reconocimiento de amor, a esa persona tan especial, a esa persona por la que lloro día y noche porque no quiero que se vaya, porque quiero que sus manos permanezcan en mí, que sus ojos sean los privilegiados en mirarme y que sus labios choquen con los míos.

Gracias, muchas gracias, por esperar de mi lo que tu me das, y gracias de nuevo y no me cansare de repetirlo por encontrar siempre el momento para hacerme sonreír y los momentos para hacerme llorar de alegría.

3 comentarios:

  1. Te Quiero ;)

    Y no me des las gracias cariño, sabes que todo lo que hago por tí sale desde lo más profundo de mi ser, y que el mayor de los privilegios que puedo tener en esta vida esa expresión en tí, ese conjunto de detalles, esa sonrisa....esa mirada única

    Quiero tus manos acariciándome, quiero tu boca susurrándome al oído, quiero tus abrazos, quiero todo de ti, mi corazón de ama, mi mente te piensa y yo no puedo vivir sin ti.

    Te Quiero

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  2. Yo de hecho ya lo hago, empecé a hacerlo desde que te conocí, y no dejaré de hacerlo, te lo prometo.

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